Diseminadas como confeti en el Pacífico, las 400 islas Fiji sobresalen por sus aguas transparentes, playas de fina arena, lagunas, verdes valles y relieves montañosos. Además, permiten conocer una cultura apasionante, donde el kava no es una simple bebida, sino una forma de vida.
La visita a sus ciudades de Labasa y Nadi nos descubre el perfume de las plantaciones de caña de azúcar y los mercados, mientras que la capital, Suva, seduce con su arquitectura colonial británica, su Fiji Museum y Albert Park. Más sorpresas: en Savusavu, sus increíbles Tunulua Peninsula e Hibiscus Highway; y en Lautoka, su pintoresca mezquita, su templo sikh y el Garden of the Sleeping Giant, impregnado del aroma de las orquídeas.
Al este se encuentran las islas Samoa occidentales, con montañas volcánicas, fondos submarinos excepcionales, playas bordeadas de cocoteros y un estilo de vida que se basa en el respeto a la familia y a los mayores. La isla principal,
Upolu, alberga alojamientos irrepetibles y una ensenada única en el mundo, Paradise Cove, aislada entre el bosque tropical y los arrecifes de coral.